Génesis 9:18-29
Pbro. Raymundo Villanueva Mendiola
Continuamos la serie de Génesis, esta vez con la temática
de este mes, llamada “El Futuro de las Naciones”. Esta serie de Marzo abarcará
de capitulo 9 al 12. Retomaremos la historia donde la dejamos. Dios, después de
castigar al mundo con el diluvio, restableció su Pacto por la vida, bendiciendo
a Noé y a su familia, ordenándoles llenar la tierra una vez más y desarrollar
la cultura, con la promesa de que nunca más destruiría el mundo con agua. El
pacto por la vida quedó sellado con el arcoíris que vemos cada vez que hay una
tormenta, haciendo que nuestro Señor recuerde su promesa de no volver a
destruir este mundo. Definitivamente este fue un Pacto proveniente de su
gracia, que permite el desarrollo humano y que restringe el poder del pecado.
Hoy veremos lo que pasó después cómo implementaron los hombres este nuevo
mundo, esta segunda oportunidad. Sobre todo bajo la conciencia de que Noé había
ofrecido sacrificio al Señor, indicando que la humanidad tomaría como punto de
partida, la Gracia y la bondad de Dios.
1.
EL
USO DE LOS DONES DIVINOS
El Señor había dicho a Noé y a su familia:
“Fructificad y multiplicaos y llenad la tierra… todo lo que se vive y mueve os
será para mantenimiento”, les dijo que las plantas y todo ser vivo sería para
que la vida continuara. Esto era una reverberación del mandato original a Adán
en Gén. 1:28, a su vez, de la tarea encargada a él, de labrar el huerto de Edén
(Gen.2). Sí, la tarea de seguir desarrollando el mundo y de hacer cultura sigue
siendo válida. Es más, el Pacto del Señor lo garantiza. Toda labor humana es
hecha bajo la garantía de que el Señor protege la obra del ser humano. Por ello
vemos florecer las artes, la educación, la tecnología, y los implementos
médicos y políticos, todo absolutamente está siendo sostenido por el poder de
la gracia de Dios. Así vemos lo que nos dicen las Escrituras en el versículo
19. A partir de Sem, Cam y Jafet, los hijos de Noé, se llenó la tierra. El
mandato del Señor está siendo cumplido, la bendición del Señor no se ha
apartado de la humanidad, sino que la vida puede seguir su curso para la gloria
de Dios.
Incluso Noé se involucra en una tarea muy especial.
Comenzó a labrar la tierra. Ya recordamos que esta fue una obra que también
realizó Adán, incluso Caín era agricultor. Pero de Noé se nos dice que plantó
una viña. Es muy interesante que en esta sección el enfoque no está en Noé y su
pecado, sino en la maldad de Cam. Pero haremos bien en entender este asunto
correctamente. El sembrar la viña, procesar el jugo de la uva, y beber su
producto final, como lo es el vino, no es pecaminoso. De hecho en muchos lugares
las Escrituras afirman uqe le vino es un símbolo de la bendición y la alegría
que da el Señor (Sal. 104:15; 2 Reyes 18:31; Oseas 2:21-22; Amós 9:13). Incluso
en otros lugres, la viña es utilizada como un símbolo de la relación entre Dios
y su Pueblo (Sal. 80.8-16;
Is. 5.1-7; Zac. 8.12). La vid y
el consecuente fruto que produce son una bendición de Dios obtenidos por el
desarrollo que el hombre hizo de las uvas. Estamos hablando entonces de un
desarrollo cultural. La vid no se queda solamente como un bello adorno, o como
un alimento que satisface la necesidad de comer. También es un producto con el
que nos bendice el Señor y que debemos usar con sabiduría. El vino (o la bebida
alcoholica) no es pecaminosa, recuerda que el pecador es el hombre. Nosotros somos
los que desvirtuamos los buenos dones de nuestro Dios.
Eso fue lo que pasó con Noé. Él bebió del vino, hasta
ahí no hay ningún problema, hasta ese momento Noé seguía siendo un fiel siervo
del Señor. Pero continuó bebiendo hasta que se embriagó. Su embriaguez lo llevó
a estar desnudo en su tienda. Tirado en el suelo, con vergüenza sobre sí mismo.
El Señor había dado una gran dignidad al ser humano, le hizo su imagen. Pero al
emborracharse, no está siendo un reflejo de la voluntad de Dios en este mundo.
Sino que se convierte en una parodia, en una burla, en una caricatura de lo que
Dios quiere que sea. La embriaguez, la borrachera es condenada por las
Escrituras en muchos lugares (Pr. 23.31-35; 1 Corintios 6:9-10). Incluso llegando a afirmar que ningún borracho
heredará el Reino de Dios. Por ello este pecado no es pequeño. Degrada al
hombre a un estado animal, alejándolo de su propósito: Reflejar la voluntad de
Dios en todo lo que haga. De ahí la gran tragedia, aquél que había “salvado” al
mundo, el que había sido escogido para dirigir a la nueva humanidad en un
servicio fiel al Señor, y quien había de ser ejemplo para muchos, yacía en el
suelo de su cuarto, desnudo, y borracho. Qué imagen tan triste. Pareciera que
el Pacto del Señor está siendo olvidado, otra vez comienza a hacer estragos el
pecado en el desarrollo que el hombre hace de la creación.
2.
LAS
RELACIONES FAMILIARES
Pero el pecado no solo afectó el desarrollo cultural,
también afectó las relaciones familiares, y obviamente las sociales, como lo
veremos más adelante. Cam, el hijo menor de Noé, entró a la tienda de su padre
y le vió desnudo. El problema hubiera sido solucionado fácilmente por él, si
con pudor y modestia hubiera ocultado ese hecho, cubriendo así la vergüenza de
su Padre. Pero no lo hizo. Cam en cambio se burló de su padre, y no solo eso
sino que fue y contó a sus hermanos, la vergüenza en que estaba su padre.
El principio que se está violentando aquí es el del
Honor que se debe a nuestros superiores, en este caso a nuestros Padres. “Cam
se alegró al ver la desgracia de su padre; tomó placer en el libertinaje y pisoteó
el temor de Dios.” (De Graff). Aquí no solo encontramos a Noé como un hombre
más, sino que también es el depositario del pacto. Lo que Cam estba siendo era
regodearse de la conducta de su padre, hacer menos el Pacto, y decir que no
tenía valor. La burla, muchas veces está precedida de incredulidad. Aquellos
que se mofan de Dios lo hacen porque no creen en él. Cam había perdido todo el
respeto y el honor que le debía a su padre, no seguía el mandato de Dios hacia
los hijos, de Honrar a tu padre y a tu madre. Y aunque este mandamiento aún no
había sido escriturado, es un reflejo de lo que se esperaba y o que se espera
naturalmente de los hijos hacia los Padres, esto incluye también cuidar en sus
debilidades a nuestros padres. No nos referimos a tolerar el pecado, sino a no
exhibir más de lo que el mismo pecado hace en nosotros.
Sin embargo, esta situación no la encontramos en Sem y
Jafet. Ellos, cuando su hermano fue a anunciar su fechoría, tomaron la ropa de
su padre y la pusieron sobre sus propios hombres, y andando hacia atrás,
cubrieron la desnudez de su padre, teniendo vueltos sus rostros. Ellos
respetaban a su Padre tanto que ni trataron de verlo desnudo, para no manchar
la imagen tan sagrada que tenían de él. Esto no es cubrir su pecado,
definitivamente el pecado quedaba en evidencia, lo que ellos hicieron no fue
cubrir su pecado, fue salvaguardar la dignidad de su padre.
Esto es sumamente trascendente. Porque el núcleo a
partir del cual se ha de reconstruir el mundo es definido por estas tres
personas. Sem, Cam y Jafet habrían de ser los fundadores de una nueva
humanidad. ¿Qué manera de vivir prevalecería entre los hombres? La de Sem y
Jafet que buscaron honrar al Señor aún en medio de una cultura corrupta, o la
de Cam, quien a través de un rechazo constante de la gracia de Dios, decide construir
contra Dios y su Reino. La Cultura humana pendía de un hilo, si los hombres son
los que han de definir cómo se dirigirá el mundo, entonces, mis amados
hermanos, no hay esperanza.
3.
DE
VUELTA AL PACTO
Noé entonces despierta de su embriaguez. Y aunque
seguramente en otras circunstancias habría buscado el perdón de Dios, en ese
momento el Espíritu lo tomó por juez y profeta (Calvino). Dios por medio de
Noé, definiría cual sería el espíritu que guiaría a la humanidad, el que
llevaría la batuta, y el que al final prevalecería. Lo primero que hace es
maldecir a Canaan, el hijo de Cam. Esto es notorio, porque apunta a dos cosas:
primero la destrucción de los cananitas por parte de los israelitas cuando
entren a la tierra prometida. Y en segundo lugar, una referencia a que la
directriz de la sociedad no será la de la raza caída. El cumplimiento de lo
primero, lo vemos cuando el Señor dice “siervo de siervos será de sus
hermanos”. Y así fue, Canaán fue conquistado y reducido a nada por las naciones
de alrededor, y sobre todo por los israelitas. A tal grado, que todas esas
naciones dejaron de existir. La maldición es estar fuera de la bendición del
pacto, no tener vida, ni tener un destino, sino solamente quedar como polvo en
el suelo.
En seguida, Noé pronuncia la bendición sobre Sem. La
Reina Valera traduce: “Bendito por Jehová mi Dios sea Sem”, pero una traducción
más literal sería: “Bendito sea Jehová, el Dios de Sem.” Lo que parece indicar
el lugar privilegiado del que gozó Sem delante del Señor. Efectivamente cuando
se quería remarcar algo muy grande y maravilloso en alguien, se exaltaba al
Señor, antes que a la persona. Porque,
todo lo bueno, lo maravilloso y loable en el hombre, proviene del Señor, y aún
más si se refiere a la gracia y el amor del Señor. Esta frase nos impulsa a
pensar que el Señor está afirmando que la bendición del mundo vendría del
linaje de Sem. Y efectivamente, fue del linaje que vino Cristo. Él vine a ser
la bendición para nuestro mundo, quien puede realmente salir victorioso en la
batalla contra la serpiente. Él ha de sostener y guiar todas nuestras acciones
para su gloria, aplastando a Satanás debajo de nuestros pies.
De hecho, la siguiente profecía hace referencia a
Jafet. De quien se nos dice: Engrandezca Dios a Jafet y habite en las tiendas
de Sem. Una referencia maravillosa a que Jafet también participará de las
bendiciones del pacto. Al estar bajo las tiendas de Sem, esto implica no solo
que recibirá la bendición del pacto, sino que el rol director será del Hijo de
Sem. Es decir, todo el desarrollo humano será dirigido para la gloria de Cristo
el Señor. El espíritu de Cam no prevalecerá, será sometido, subyugado al poder
de Cristo, y nosotros, podremos servir y honrar en libertad al Señor con todo
lo que somos y hacemos. Así, tanto el desarrollo cultural (el disfrute del
vino) como la vida familiar y las diversas relaciones sociales, serán afectadas
por el pecado, sí, pero en última instancia todo se encaminará a la Gloria de
nuestro Dios.
CONCLUSIÓN
En nuestros días pareciera ser lo contrario, ¿no te
parece? Pensamos que este mundo está siendo dirigido por el mal. La profecía de
Cristo “el mal se aumentará” resuena entonces en nuestros oídos. Pero en
realidad el Cordero ha vencido, y es digno de tomar en sus manos la historia
humana (Apocalipsis 5). Él está sentado en el Trono, reinando, gobernando y
sosteniendo todo su mundo para la gloria de su nombre. Él está peleando
efectivamente contra las huestes del mal, haciéndolas ver cada vez más, como lo
que son, débiles e inútiles ante el poder del Señor. Ellos pueden creer que
llevan la delantera, pueden incluso matar a nuestros hermanos, pueden incluso
hacer que los cristianos tiemblen, pero Cristo sigue siendo Rey. Cristo sigue
sentado en su trono, glorioso y majestuoso. Nada, ni nadie lo quitará de ahí,
porque su Reino es reino eterno que siempre durará. Y al final del siglo,
cuando Él regrese victorioso, todos sus enemigos estarán por estrado de sus
pies. Hoy, pues te toca a ti hermano y hermana, luchar en esta batalla
cultural. Presentar defensa del evangelio, y luchar hasta el final, hasta que
sangres, hasta que llores, y clames al Señor por su victoria. Y le puedas
ofrecer a él, todo tu trabajo y toda tu labor, descansando en la obra que
realizó Jesús, el Rey de reyes y Señor de señores.
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